Summerhill
Hace años estuve en una academia de inglés llamada Summerhill. Un día hablando con el profe y dueño de la academia nos contó el porqué del nombre: Summerhill es una escuela internado fundada en 1921 en Alemania por A. S. Neill (más tarde se traspasó a Inglaterra donde sigue hasta hoy). Lo que hace especial a esta escuela es su filosofía: nadie obliga a los alumnos a nada. Ellos eligen si quieren ir a clase, a qué clases quieren ir, qué hacer con su tiempo... Neill estaba convencido de que los niños aprenden mejor en libertad. Parte de la idea de que los niños son buenos por naturaleza, no como en la enseñanza tradicional donde todos son malos y hay que educarlos.
Poco después me leí el libro que el propio Neill escribió contando sus ideales y experiencias en la escuela. La idea que me quedó de aquella lectura es bastante simple: a todos nos gusta aprender y a los niños más. Por qué asfixiar ese deseo con un sistema de enseñanza dictatorial.
Leyendo BoingBoing me he encontrado con el trailer de un video sobre la Fairhaven School en el que los propios alumnos cuentan cómo es la vida allí (in inglis):
La pregunta con la que empieza es aplastante: ¿Y si todas nuestras ideas sobre la enseñanza fueran erroneas? En esta escuela democrática no hay director. Una asamblea formada por alumnos, padres y personal docente por igual toma las decisiones. Los alumnos, al igual que en Summerhill, deciden qué quieren hacer con su tiempo.
Aunque yo soy partidario de que ningún sistema es perfecto, la idea me sigue atrayendo mucho. ¿Qué me dices? ¿Ingresarías a tu hijo en una escuela así?
Poco después me leí el libro que el propio Neill escribió contando sus ideales y experiencias en la escuela. La idea que me quedó de aquella lectura es bastante simple: a todos nos gusta aprender y a los niños más. Por qué asfixiar ese deseo con un sistema de enseñanza dictatorial.
Leyendo BoingBoing me he encontrado con el trailer de un video sobre la Fairhaven School en el que los propios alumnos cuentan cómo es la vida allí (in inglis):
La pregunta con la que empieza es aplastante: ¿Y si todas nuestras ideas sobre la enseñanza fueran erroneas? En esta escuela democrática no hay director. Una asamblea formada por alumnos, padres y personal docente por igual toma las decisiones. Los alumnos, al igual que en Summerhill, deciden qué quieren hacer con su tiempo.
Aunque yo soy partidario de que ningún sistema es perfecto, la idea me sigue atrayendo mucho. ¿Qué me dices? ¿Ingresarías a tu hijo en una escuela así?
Etiquetas: cultura, curiosidades, gente
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